Para saber si debes realizar una prueba visual, lo primero es revisar antecedentes genéticos. Si en tu familia existen personas con problemas de miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia, etc. Es más probable que tu agudeza visual vaya disminuyendo con el tiempo.
Entrecerrar los ojos
Este es uno de los signos más notorios de que necesitas hacerte un examen de la vista. Cuando entrecierras los ojos de una manera forzada para lograr ver las cosas, estás creando una mala costumbre que puede generar estrabismo problema visual que hace que los ojos no estén alineados correctamente y apunten en diferentes direcciones, por ello es importante diagnosticar tu salud visual.
Sufrir dolores de cabeza después de pasar un rato frente a la computadora, es otro signo para hacerte un examen de la vista y adquirir unos anteojos nuevos. Si presentas dolores en la frente, seguro es consecuencia de estar forzando la vista -incluso sin darte cuenta.
Cuando esforzamos mucho los músculos de los ojos para ver bien las letras pequeñas, se presenta la sensación de fatiga visual que también provoca ardor y ojos enrojecidos. Si estás experimentando este síntoma, las probabilidades de que necesites usar lentes son muy altas.
Otro signo muy común de que requieres hacer una prueba visual, se nota cuando lees un libro y necesitas alejarlo o acercarlo mucho a la altura de tus ojos para poder enfocarlo. Si haces esto muy seguido, es probable que necesites unos anteojos adecuados para atender un problema visual.
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